Hoy en día, es cada vez más común el escuchar el término de User Experience (o UX en su forma corta), pero como muchas veces pasa con las buzzwords que de repente aparecen en nuestro contexto social, no todos estamos seguros de qué es lo que realmente significa o implica, por lo que por medio de este artículo, buscaremos despejar las dudas al respecto de esta mítica palabra.

¿Qué es User Experience?

UX es básicamente la experiencia que el usuario tiene al momento de utilizar nuestro sistema, el cómo se siente al interactuar con él, ya sea que nuestro sistema sea una página web, una aplicación móvil o de escritorio. En el momento que el usuario empieza a utilizar nuestro producto, una serie de expectativas se van formando con respecto a él, por lo que debemos de responder de modo acorde a ellas, ya que si traicionamos las expectativas que se tienen, se genera una mala experiencia en el usuario, la cuál termina afectando la credibilidad de nuestros productos. Al respecto de la experiencia de usuario, Don Norman (creador del término) y Jakob Nielsen (padre de la usabilidad) nos dicen:

“El primer requerimiento para una experiencia de usuario ejemplar es cumplir las necesidades exactas del usuario, sin que haya líos ni problemas. La verdadera experiencia de usuario va más allá de darle a los usuarios lo que dicen que quieren, o hacer un checklist de funcionalidades. Para poder lograr una experiencia de usuario de alta calidad debe haber en el ofrecimiento de la compañía una mezcla de los servicios de múltiples disciplinas.”

La experiencia de usuario está muy centrada en los aspectos visuales, por lo que es muy común el que la relacionen y confundan con otras dos áreas: la usabilidad y la interfaz de usuario gráfica. Aún cuando ambas son elementos muy importantes para lograr una gran experiencia de usuario y están fuertemente relacionados, son cuestiones distintas. La usabilidad se centra en la facilidad que el usuario tiene para poder hacer uso de un sistema, mientras que la interfaz de usuario gráfica posibilita una interacción más amigable con el sistema en cuestión al hacer uso de un lenguaje visual para traducir instrucciones entre el usuario y la computadora.

La principal diferencia es que la experiencia de usuario engloba a los dos anteriores, ya que trata sobre el sentir general que tiene el usuario al utilizar un sistema, por lo que implica no sólo a estas dos disciplinas, sino otros factores más que conforman lo que Peter Morville denominó como el Panal de la Experiencia de Usuario.

Las Facetas de la Experiencia de Usuario

Usando como base el panal de la experiencia de usuario, vemos que los sistemas y aplicaciones deben de considerar las siguientes facetas:

• Debe ser Útil – Siempre debemos preguntarnos, ¿lo que estamos haciendo es algo útil? Como diseñadores, debemos usar nuestro conocimiento y creatividad para encontrar soluciones innovadoras que sean de utilidad para el usuario.
• Fácil de Usar – Una de las verdades más verdaderas de la vida es que mientras más fácil de usar sea algo, más lo vamos a usar. Ejemplos como Apple, cuya principal característica en sus productos es la facilidad de uso, donde cualquier persona puede tomar alguno de sus productos y en minutos usarlo.
• Objeto de Deseo – Comúnmente las personas siempre buscamos que las cosas que usamos tengan altos valores estéticos, ya que las cosas que consideramos bellas cautivan nuestros sentidos y hacen que tengamos una mayor apreciación hacia ellas.
• Fácil de Encontrar – Debemos buscar que cada producto que hagamos facilite al usuario encontrarse dentro del espacio digital, por lo que una navegación consistente hace que las personas no se pierdan y ubiquen fácilmente aquello que necesitan de nuestra aplicación o sistema.
• Accesible – La accesibilidad hoy día es algo esencial, cuando hablamos de accesibilidad nos referimos a la capacidad que tienen las personas de utilizar un sistema independientemente del agente de uso que manejen.
• Debe Generar Credibilidad – La credibilidad es importante porque genera confianza en el usuario, lo que ocasiona que se use con más frecuencia. Ya hay diversos estudios que nos están empezando a mostrar qué elementos de diseño son los que influyen en si los usuarios creen o no en lo que nosotros les decimos.
• Debe Generar Valor – Nuestros sistemas deben darle algo de valor tanto al usuario como a las personas que están detrás del sistema. Por ejemplo, un sitio de cines debe poder dar los horarios que el usuario necesita. Para el cine, el valor está en que le genera más negocio.

Consideraciones Finales

Anteriormente, cuando apenas se empezaban a generar los sistemas, las personas no ponían tanto énfasis en las interacciones que los usuarios tenían con los sistemas, ya que el simple hecho de que funcionaran aseguraba que el trabajo de las personas disminuye de modo considerable. Hoy en día no es el caso, ya que con el paso del tiempo los sistemas empezaron a proliferar, por lo que una parte importante de su correcto funcionamiento es que se sientan bien al usarlos, por lo que los principios expuestos anteriormente cobran gran importancia.

Es responsabilidad de las personas encargadas de diseñar el considerar no sólo el aspecto gráfico de las interfaces, sino todos los aspectos que conllevan la experiencia del usuario para así poder generar mejores experiencias para los usuarios, llenando sus expectativas creando confianza mutua, y así ayudar a unir a los usuarios con las empresas o instituciones que se encargan de realizar sistemas.

Para aprender más del tema de Experiencia de Usuario de forma práctica los invitamos a asistir al Curso de Lean UX el próximo 3 de Septiembre en Activ.